Este piso de lo más luminoso tenía todo de origen. Lo que hicimos fue aprovechar que la estructura era de pilares para cambiar casi totalmente la distribución y así adaptarla a los nuevos propietarios. La pareja, con las ideas bien claras sobre qué necesitaban, apostó por por abrir y unir las zonas comunes como el recibidor y la cocina, y crear un espacio multifuncional que sirviera tanto de despacho como de sala de juegos para sus dos hijos.
La cocina abierta permite que el acto de cocinar sea un acto social donde todo el mundo participe.
La paleta de colores y acabados se elige para crear un ambiente luminoso y moderno. Las vigas vistas y el parquet oscuro dan ese punto de personalidad y contraste al espacio blanco: un lienzo listo para llenar con mobiliario, decoración y juguetes!